Dice un proverbio chino que no se usa buen hierro para hacer un clavo ni un buen hombre para hacer un soldado. Es algo que me repito porque va perfectamente con mi convicción de que todo policía es un hijo de puta. Con niveles de maldad más o menos altos, con la saña más o menos latente, con más o menos capacidad para refrenar sus instintos, pero un hijo de puta igual.
Por eso me caen bien los blitzers, que no se bañan y andan a la maroma por la vida y no saben quién carajo es Bakunin si les preguntas, pero que le parten para arriba a la monada con unas ganas que da gusto verlos, piedra limpia contra caballos y escudos.
No ganan jamás, claro, pero la victoria también es relativa.
Chica, a mi, por algo que no puede ser más que un prejuicio, me cae mal la policía. Pero cuando veo en las manifestaciones a los encapuchados que comienzan a golpear policias a diestra y siniestra, no puedo menos que sentirme mal. Al final, los que entran de policias acá, son personas que no tienen otras muchas opciones; repobres, como los que protestan.Y por último, ninguna bronca que no sea en igualdad de condiciones la acepto. Eso de 5 personas pegándole a un policía se me hace un abuso. Admito que la mayoría de la veces es la policía la que da palos, pero al final, la policía no es la causante de todo.
ReplyDeleteNo, por supuesto que no. Pero a mi me causan rechazo. LOs veo en sus caballos enormes, paseándose entre los junkies, o sacando a algún infeliz de una estación de trenes y me come la rabia. Y eso es con los de aquí, que lo que llevan para defenderse es un bastón y un spray: cuando los veo repartiendo golpes y patadas en una manifestación, o hinchados como paloma empachada con sus metralletas, recorriendo de arriba a abajo los aeropuertos y mirando a todo el mundo como si fuera un terrorista, quisiera desaparecerlos.
ReplyDeleteCreo que en ningún país la policía es bien vista y para colmo nunca queda bien, si pone esposas y se pone un poco fuerte, le gritan abusador y si se deja mangonear, ya tu sabes, peor que peor. Al final, todo el mundo habla mal de ellos, palos porque bogan y palos porque no bogan.
ReplyDeleteEs cierto, unas veces merecen más los insultos y la animosidad que otras. Los policías cubanos, por ejemplo, partida de hijos de puta, esbirros abusadores y cobardes -la redundancia va-, esos merecen que les digan hasta del mal que van a morir. A los policías de los países civilizados, que dan palos pero luego los pagan, con gritarles "maricones!" una vez al mes hay.
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