De la misma manera en que algunos tienen habilidad y buen ojo para descubrir prendas únicas en pulgueros de misericordia, otros olemos los buenos libros aunque estén escondidos entre periódicos viejos, tratados marxistas y novelitas rosa o, como en este caso, en la olvidada estantería de una librería por divisa en la que entra un cliente una vez al año (yo).
Los niños de Montgomery me atrapó desde la primer página y tres horas después, al terminarlo, seguía bajo el hechizo. Tiene un poco de la magia de "Cien años de soledad" -referencia válida para los bienaventurados que leen al Gabo, claro, los que no han de buscar otras- el realismo desolador de "Las viñas de la ira" (Steinbeck) y la violencia de "Luz de Agosto" (Faulkner), tres de mis libros más leídos, así que no es de extrañar.
Lo recomiendo de todo corazón, porque además de la ficción ofrece también una vista panorámica de la historia social de los negros en los Estados Unidos desde los años 40 hasta entrada la década de los 80, sin volverse por un momento tedioso o dogmático.
Buen provecho.
Lo anoto en mi lista de libros por leer.
ReplyDeletegracias por la recomendacion, trataré de buscar un huequito en mi tiempo para leerlo.
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