Era feo, tramposo y chapucero, pero mi alma sigue siendo de aquel pobre muñeco mecano, solo y repudiado, arrastrando su patica herida al compás de la música más triste del mundo.
Este es el link a una página donde encontrarán no sólo éste animado sino muchísimos otros. Los que cuenten con un ruso menos primitivo que el mío, sobre todo, verán los cielos abiertos.
Yo lo que se es que ahora quiero comprarme uno de estos http://en.wikipedia.org/wiki/Merkur_%28toy%29
ReplyDeleteAh, qué chulín!
Delete:P
ReplyDeleteLenguas tenga usted.
Deletehumm,los polacos también hacían cosas increibles. Me da mucha nostalgía este film, yoyo.
ReplyDeleteLos polacos, los checos, los rumanos. Con otra onda, menos dramática que la de los rusos, menos elaborada, pero igual increíblemente buenos.
DeleteEra angustiosa su carita al final de la carrera. Gracias a él comprendí muy temprano lo que eran la compasión y la empatía. Un abrazo lluvioso, María
ReplyDeleteMe pasaba exactamente lo mismo. Abrazos de granizo de vuelta.
DeleteA mí también me daba mucha lástima, es que no era malo, solo un poco diferente.
ReplyDeleteExacto!
DeleteA veces me daba tanta lastima que no podia terminar de verlo y mi abuela me decia que para que me iba de delante del televisor si ya me lo sabia de memoria....en fin..
ReplyDeleteapretaste Guardarraya este es tremendo recuerdo....
Y por aqui abrazos quemantes porque el verano llego bravo....
No le guardo ningún rencor a los muñequitos rusos, o polacos como muchos dicen sentir. En realidad estos dibujos me hicieron muy feliz.
ReplyDeleteEste era lindo de verdad, aunque algo triste.
Bello recuerdo. Mil gracias!
Yo creo que los que les guardan rencor son los mismos que rabian con todo lo que tenga que ver con Cuba y para mi esa gente sencillamente no cuenta como tal.
ReplyDeleteA MI ME GUSTABA EL CARRO UN TIPICO REFLEJO DE DUEÑO Y SIN EMBARGO LA HIZO HASTA EL FINAL
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