Ayer leía esto y me quedé pensando que en realidad, y puestos a escoger, yo creo que de entre todos los libros de cuentos prefiero los de "Las mil y una noches", que están plagados de discriminaciones, asesinatos, robos, magia negra, vampirismo y hasta zoofilia, pero en los cuales las princesas son siempre, SIEMPRE, multiorgásmicas.
Si, creo que me quedo con estos.
No sólo multiorgásmicas: también bellas, hechiceras, inteligentes (casi sabias), comprensivas, nobles, amorosas y sensuales... En fín: Princesas del Oriente.
ReplyDeleteJAJAJAJ, solo a tí se te podía ocurrir eso!!!
ReplyDeletePiénsenlo bien: son los únicos cuentos de la historia en los que el héroe y su dama, en lugar de ponerle fin a la cosa diciendo que vivirán felices y dándose besos de piquito, van a lo que cuenta y además con lujos de detalles, que no por sutiles eran menos gráficos.
ReplyDeleteAdemás, en las narraciones orientales las mujeres son de armas tomar: lo mismo llenan de aceite ánforas que contienen cabezas rebanadas que convierten en perro a la suegra. A ver si no es eso preferible a ser la aburriiiiiiiiiiiiida de Blanca Nieves.
He dicho! ;)
ReplyDeleteCuño y tres copias! ;)
DeleteA mí me gustaba Tía Tata. Pero bueno, tú ya sabes que mis traumas son de altura.
ReplyDeleteY el Decamerón es una maravilla, así no más.
Ahí también se pueden encontrar muy buenos expedientes ja ja !! Recuerdo ahora mismo a la ¨inocente¨ y bella Alibech (siempre quise conocer una mujer justo ¨así¨ de tan fervorosa creencia y convencida disposición para servir ¨al señor¨..!! ) Y nada, que el cuento corrobora lo de esas muchachas ¨tranquilitas¨ jajaja :)
DeleteNo puedo con Blanca Nieves.., pa'monga no le gana nadie! Incienso y gozadera todo el tiempo!
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