Manzanillo
monte sin frutas, cerca sin janes
mujeres putas y hombre' haraganes.
La señora que piensa que las esfinges son centauros ha vuelto a la carga. Le parece que el verso de arriba es en grado sumo vulgar, y ha amenazado a mi marido con borrar de Mundo Manzanillero, página facebokiana dedicada a la ciudad del Golfo, todo un álbum con fotografías de postales antiguas -pertenecientes a la colección privada de un amigo- que mi marido tuvo a bien compartir con el resto de los miembros del grupo, por ostentarlo como pie de foto.
Mi abuelo recitaba ese verso. Mi abuelo, el ex-alcalde, el manzanillero nato que regresó de Niu Yor porque su pueblo le interesaba más que la gran urbe, el anciano a quien aún recuerdan tantos por su decencia a prueba de balas. Mi abuelo, que no decía coño sino concho y para quienes las putas eran "muchachas alegres" y los maricones "jovencitos medio flojos".
Las fotos han sido borradas antes de que fueran pasto de la censura. A la egregia señora se le ha enviado un mensajito donde se le desea buena suerte -para contrariedad de Mariana, que insiste en que lo correcto era recetarle un maratón de sexo anal con un representante de alguna tribu africana- y fortaleza de corazón: esa mezcla de ignorancia y ansia de control absoluto a la larga o a la corta es letal.
como dice lo que le apetece: no os dejeis provocar.
ReplyDeleteFacebook, esa ciberfrontera de las represiones y los sofocos matinales. Si yo te digo a ti..hay cada una que pa'que..
ReplyDeletePara que veas que la diferencia entre comuñangas y derechongos es meramente geográfica: me juego al canelo que si a esa vieja la sacan de Miami y la ponen en Manzanillo coge el cargo de Vigilancia.
ReplyDeleteYo no se si es el isleñismo, la mezcla o que carajos, pero mira que a nuestros compatriotas les gusta levantar el dedo y ordenar a los demas que hacer con sus santas vidas, que ver, que comer...pa'l carajo.
ReplyDeleteY que no le hagan caso a Mariana, con lo bueno que está el consejito...
ReplyDeleteEL consejo de Mariana está de altura. Deja que lo diga, a la señora le hace falta.
ReplyDeleteLo que le hace falta es despertar de la imbecilidad más absoluta y la ignoracia que se la come por dentro.
ReplyDeleteDe esta gente estamos plagados, parece que sobrevivieron a las que mandó Jehová.