No voy a cogerle faltas. En primer lugar porque me cae demasiado bien este inglés pequeñajo e hiperactivo que me saca sonrisas a granel con sus payasadas. Y luego porque ya estoy acostumbrada a ver la realidad cubana tergiversada de mil maneras, así que pocas cosas me sorprenden.
Lo único que me gustaría decirle a Ian es que ojalá. Ojalá fuéramos ese país verde y azul lleno de pioneros madrugadores y gráciles bailarinas, de campesinos fuertes y risueños, de médicos sacrificados y líderes justos que describe. Sería tan, tan bonito.
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Somos eso también amiga, tenemos que luchar por serlo cada día de nuestra vida y en realidad es muy difícil, casi imposible, pero también somos eso.
ReplyDelete...y... la patria entera embravecida...
ReplyDeleteOfe, ahí disentimos. De esos valores nos queda algo, o mejor dicho, con ellos quedan algunos cubanos, que juntos harían bulto pero que desgraciadamente no son mayoría. Nada me gustaría más que pertenecer a ese aguerrido pueblo que tanto nos vendieron, pero la realidad es que nos hemos convertido en los cubanos que describió Reinaldo Arenas.
ReplyDeleteOjalá, Ojalá fuéramos como nos quieren ver o como algunos quieren que nos vean, ojalá, rezo por eso a todo en lo que no creo.
ReplyDeleteA lo mejor algún día, Yoyi.
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