Hoy leía en el diario a un doctor en psicología infantil que recomendaba que los padres que no tuvieran un alto presupuesto que invertir en regalos de Navidad para sus hijos conversen con estos acerca de lo que van a recibir, para que al regresar a la escuela después de las vacaciones no los golpee la diferencia entre los regalos que han recibido los hijos de padres pudientes y los suyos propios.
Qué difícil ha de ser, he pensado, sostener esa conversación. Qué difícil presentarle a un niño las diferencias de clases y no tener para ellas más explicación que el que así, de manera tan injusta, está repartido el mundo y hay poco que hacer para remediarlo.
Qué difícil ha de ser saberse pobre en uno de los países más ricos del mundo.
A mi y a mi hermana nos pasaba lo mismo, creo que no nos tocó jamás comprar entre los primeros. La diferencia para mi es que no me interesaban los juguetes sino los libros, y para esos no había competencia. Tampoco para los rollitos del proyector, que era mi segundo entretenimiento favorito.
ReplyDeletePero puedo perfectamente imaginarme lo que se siente, sobre todo porque tengo hijos. Creo que verlos así de frustrados me mataría de tristeza.
No se si una conversacion ayudaria mucho para casoso como esos.
ReplyDeleteA nuestro hijo desde pequenno le dijimos que a Santa esa pedidera no le gustaba mucho, y que nosotros como cubanos que eramos, no teniamos porque hacer esas grandes listas, y ppor suerte se acostumbro a pedirle al Santa una sola cosa y la verdad nada del otro mundo. Cuando supo que Santa no existia entonces le dijimos, ahora, con mas razon, usa tu cabeza para la Navidad.
Si, debe ser malo ver al de al lado tener todo eso, yo la verdad no me acuerdo mucho del asunto solo que me tocaba siempre el 6to dia y teniamos que comprarle los numeros a alguien que los vendiera.
Buen fin de semana, besos
Supongo que ha de ser dificilisima y, como dice Fermina, no ha de ayudar mucho, al contrario porque el chama debe cuestionarse aun mas el porque los padres, si lo saben, no hacen nada para cambiarlo. No se por alla, pero por estos lares el bombardeo publicitario a los chamas, con algunas pocas excepciones, es impresionante por lo intenso. En mi caso nos hemos enfocado mas en el aspecto magico de la Navidad que en la locura de las compras y del "juguete de moda", si al final siempre terminan jugando con las cajas...
ReplyDeleteComo Fermina, le he enseñado a mi hija a pedir poco para que Santa le pueda llevar a los demás y este año compramos un regalo cada una para unos niños de un shelter. Terminó escribiéndole a Santa que además de los de ella, les trajera a los nenes del shelter lo que ellos quieren.
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