Cada día de verano es un regalo
un regalo -Dios sabe de quién.
Pero yo agradezco y reverencio,
y la orilla suspira,
y las olas sonríen,
y el duro granito parece de seda
al pasar.
Buen día.
Cada día de verano es una barca,
navegando en su propio mar.
Yo estoy a bordo, yaciendo muy vivo,
y sobre mí se mueven amistosas nubes
que nada me piden.
Buen día.
Buen día, montañas soleadas.
Buen día, vida.
Buen día, agua salada y gaviotas y macarelas fritas.
Buen día, verano.
Buen día.
Odd Børretzen. Escritor, ilustrador, traductor y vocalista noruego.
No comments:
Post a Comment
¡Habla, pueblo de Aura!