El maratón comienza en la parte vieja de la ciudad, la más pintoresca, conocida como el Viejo Oslo, y consiste en visitar, uno por uno, los oscuros, entrañables bares del lugar, hasta llegar a veinte. El punto de arranque es el bar situado frente a las ruinas medievales en la parte Sur de Oslo, y termina en el bar "Fiasco", más cercano al centro de la ciudad, por eso la carrera es llamada "De las ruinas al fiasco".
Los vencedores son, por supuesto, los que hagan el recorrido completo y lleguen a la meta con cierto donaire, pero está perfectamente permitido quedarse a medio camino o incluso ser mero espectador desde alguno de los bares incluidos en la ruta, disfrutando del ambiente y de la música magistral de Tom Waits, el bardo que envuelve las historias más terribles en las más bellas melodías.