- No pienses que tú eres especial.
- No pienses que tú estás a la misma altura que nosotros.
- No pienses que tú eres más listo que nosotros.
- No pienses que eres mejor que nosotros.
- No pienses que sabes más que nosotros.
- No pienses que eres más importante que nosotros.
- No pienses que eres bueno en nada.
- No te rías de nosotros.
- No pienses que preocupas a alguien.
- No pienses que tú puedes enseñarnos algo.
La ley de Jante. En sueños la rebate una punto por punto, con placer de casta de gendarmes. Ya despierta, y con la garganta cerrada cual La Pasionaria, lo mejor es hacer con ella una bolita y lanzarla al mismo lugar al que enviaba Fermina su abanico en tiempos de brisa. Con perdón de Sandemose y de los terrícolas.
No comments:
Post a Comment
¡Habla, pueblo de Aura!